Camino a la supervivencia

Los jugadores son supervivientes de una catástrofe global. Un jugador interpreta al narrador.
Los supervivientes juegan en equipo. Escogen en secreto una especialidad: Defensa, Destreza, Persuasión, Supervivencia. Escogen una virtud: Empatía, Raciocinio, Sabiduría, Suerte. Anotan ambas en una tarjeta.
Todos comienzan con 3 puntos de acción y 3 de vida.
El narrador elabora tantos desafíos temáticos como el triple de supervivientes, asignando en secreto una especialidad y una virtud que los resuelve. Presenta un desafío por ronda.
Un superviviente puede ofrecerse para superarlo; para ello, declara especialidad o virtud, sin nombrarla, y muestra su tarjeta al narrador.
Si elige especialidad y coincide con la del desafío, gasta 1 punto de acción; si no coincide, pierde 1 punto de vida.
Si elige virtud y coincide, no gasta nada; si no coincide, todos pierden 1 punto de vida.
En cualquier caso, el grupo progresa hacia el siguiente desafío.
Si nadie se ofrece voluntario, hay conflicto, que se resuelve arrojando una moneda para cada superviviente: cara le permite progresar sano y salvo, y ceca le quita 1 punto de acción o de vida (a elección).
Sin puntos de acción disponibles, no pueden activar especialidades ni evitar conflictos; sin puntos de vida, mueren.