El cruciforme

Sois muchas. El cruciforme os ha atrapado a todas y os ha encerrado en este horrible lugar. Dejad sobre la mesa, donde podáis cogerlas, una caja de cerillas y una linterna. Apagad las luces. Por turno decid en voz alta vuestro nombre de víctima. Después, por turno, coged una cerilla, encendedla y narrad lo que os ha ocurrido. ¿Cómo os atrapó el cruciforme? Callad cuando se apague la cerilla. Cuando todas hayáis hablado, decid por turno un nombre. El vuestro, si queréis. Elegid un nombre, el más repetido. Llegad a un acuerdo si es necesario. Iluminad con la linterna el rostro de la persona elegida. Dejad que hable, que suplique, que llore. El cruciforme la ha elegido. Apagad la linterna, dad dos golpes sobre la mesa. Coged de nuevo por turno una cerilla y continuad vuestra historia. Cuando le llegue el turno a una elegida, debe hablar del cruciforme, de su propia muerte a manos del cruciforme. Cuando todas hayáis hablado, elegid un nuevo nombre. Iluminad a esa persona. Que hable. Continuad hasta que solo queden dos personas sin elegir. Una de ellas es el cruciforme. Iluminadla. Dejad que os explique quién es y por qué lo ha hecho.